2 Reyes 4:25

Ella se marchó y llegó a donde estaba el hombre de Dios, en el monte Carmelo. Y sucedió que cuando el hombre de Dios la vio de lejos, dijo a su criado Guejazi: —He allí la sunamita.

Otras versiones de la Biblia

La mujer se puso en marcha y llegó al monte Carmelo, donde estaba Eliseo, el hombre de Dios. Éste la vio a lo lejos y le dijo a su criado Guiezi: ¡Mira! Ahí viene la sunamita.

- Versão NVI-ES (Nueva Version Internacional)

La mujer partió y fue a ver al profeta, que estaba en el monte Carmelo. Cuando Eliseo la vio, le dijo a su sirviente: «Mira, allá a lo lejos viene la señora del pueblo de Sunem.

- Versão TLA (Traducción en Lenguaje Actual)

Fue ella y llegó donde el hombre de Dios, al monte Carmelo. Cuando el hombre de Dios la vio a lo lejos, dijo a su criado Guejazí: «Ahí viene nuestra sunamita.

- Versão BJ-ES (Biblia de Jerusalen)

Partió, pues, y vino al varón de Dios, al monte Carmelo. Y cuando el varón de Dios la vio de lejos, dijo a su criado Giezi: He aquí la sunamita.

- Versão RVR60 (Reina Valera 1960)

Partió, pues, y vino al varón de Dios al monte del Carmelo. Y cuando el varón de Dios la vio de lejos, dijo a su criado Giezi: He aquí la sunamita:

- Versão RVR04 (Reina Valera 2004)

Contexto del verso

  • 24
    Después hizo aparejar el asna y dijo a su criado: —Toma la rienda y anda. No te detengas por mí en el viaje, a menos que yo te lo diga.
  • 25
    Ella se marchó y llegó a donde estaba el hombre de Dios, en el monte Carmelo. Y sucedió que cuando el hombre de Dios la vio de lejos, dijo a su criado Guejazi: —He allí la sunamita.
  • 26
    Ahora, por favor, corre a su encuentro y pregúntale: '¿Te va bien? ¿Le va bien a tu marido? ¿Le va bien a tu hijo?' Y ella respondió: —Bien.

Imagen del verso

Ella se marchó y llegó a donde estaba el hombre de Dios, en el monte Carmelo. Y sucedió que cuando el hombre de Dios la vio de lejos, dijo a su criado Guejazi: —He allí la sunamita. - 2 Reyes 4:25