Así será cuando el Señor lave la inmundicia de las hijas de Sion, y elimine la sangre de en medio de Jerusalén, con espíritu de juicio y con espíritu consumidor.
Con espíritu de juicio y espíritu[1] abrasador, el Señor lavará la inmundicia de las hijas de Sión y limpiará la sangre que haya en Jerusalén.
»Cuando yo dicte sentencia y castigue a mi pueblo, perdonaré a los habitantes de Jerusalén de los crímenes que han cometido.
Cuando haya lavado el Señor la inmundicia de las hijas de Sión, y las manchas de sangre de Jerusalén haya limpiado del interior de ella con viento justiciero y viento abrasador,
cuando el Señor lave las inmundicias de las hijas de Sion, y limpie la sangre de Jerusalén de en medio de ella, con espíritu de juicio y con espíritu de devastación.
cuando el Señor haya lavado las inmundicias de las hijas de Sión, y limpiado la sangre de Jerusalem de en medio de ella, con espíritu de juicio y con espíritu de fuego.