Unos aseguraban: 'Sí, es él.' Otros decían: 'No es él, sino que se le parece.' Pero él insistía: 'Soy yo.'
Unos decían: «Sí, es él.» Otros decían: «No, no es él, aunque se le parece mucho.» Pero él mismo decía: «¡Claro que soy yo!»
Unos decían: «Es él». «No, decían otros, sino que es uno que se le parece.» Pero él decía: «Soy yo.»
Unos decían: El es; y otros: A él se parece. El decía: Yo soy.
Unos decían: Este es; y otros: A él se parece. El decía: Yo soy.