Mateo 18:8

Por tanto, si tu mano o tu pie te hace tropezar, córtalo y échalo de ti. Mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno.

Otras versiones de la Biblia

Si tu mano o tu pie te hace pecar, córtatelo y arrójalo. Más te vale entrar en la vida manco o cojo que ser arrojado al fuego eterno con tus dos manos y tus dos pies.

- Versão NVI-ES (Nueva Version Internacional)

»Si lo que haces con tu mano o con tu pie te hace desobedecer a Dios, mejor córtatelos y tíralos bien lejos. Es mejor vivir para siempre sin una mano o sin un pie, que ir al infierno con las dos manos y los dos pies.

- Versão TLA (Traducción en Lenguaje Actual)

«Si, pues, tu mano o tu pie te es ocasión de pecado, córtatelo y arrójalo de ti; más te vale entrar en la Vida manco o cojo que, con las dos manos o los dos pies, ser arrojado en el fuego eterno.

- Versão BJ-ES (Biblia de Jerusalen)

Por tanto, si tu mano o tu pie te es ocasión de caer, córtalo y échalo de ti; mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno.

- Versão RVR60 (Reina Valera 1960)

Por tanto, si tu mano o tu pie te hacen caer, córtalos y échalos de ti; mejor te es entrar cojo o manco en la vida, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno.

- Versão RVR04 (Reina Valera 2004)

Contexto del verso

  • 7
    ¡Ay del mundo por los tropiezos! Es inevitable que haya tropiezos, pero ¡ay del hombre que los ocasione!
  • 8
    Por tanto, si tu mano o tu pie te hace tropezar, córtalo y échalo de ti. Mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno.
  • 9
    Y si tu ojo te hace tropezar, sácalo y échalo de ti. Mejor te es entrar en la vida con un solo ojo, que teniendo dos ojos ser echado en el infierno de fuego.

Imagen del verso

Por tanto, si tu mano o tu pie te hace tropezar, córtalo y échalo de ti. Mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno. - Mateo 18:8