Dolores de mujer que da a luz le sobrevendrán. Pero él es un hijo torpe, que no se presenta al tiempo de nacer.
Llegan los dolores de parto, pero él es una criatura necia: ¡cuando llega la hora del parto, no se acomoda para salir!
»¡Qué tonto eres, Israel! ¡Te pareces a esos niños que están a punto de nacer, pero que no se acomodan!
Dolores de parturienta le asaltan, pero él es un hijo necio que no se presenta a tiempo por donde rompen los hijos.
Dolores de mujer que da a luz le vendrán; es un hijo no sabio, porque ya hace tiempo que no debiera detenerse al punto mismo de nacer.
Dolores de mujer de parto le vendrán; es un hijo no sabio, que de otra manera no se detuviera tanto en el tiempo del nacimiento de los hijos.