Y le dije: 'Te quedarás conmigo muchos años. No te prostituirás ni serás de otro hombre; lo mismo haré yo contigo.'
[1] y una carga y media de cebada,[2] y le dije: 'Vas a vivir conmigo mucho tiempo, pero sin prostituirte. No tendrás relaciones sexuales con ningún otro hombre. ¡Ni yo te voy a tocar!'
Y luego le dije a ella: «Ya eres mía, y vivirás conmigo mucho tiempo. Si tú prometes serme fiel, yo también te seré fiel, aunque por un tiempo no viviremos como esposos».
Y le dije: «Durante muchos días te me quedarás quieta sin prostituirte ni ser de ningún hombre, y yo haré lo mismo contigo.»
Y le dije: Tú serás mía durante muchos días; no fornicarás, ni tomarás otro varón; lo mismo haré yo contigo.
Y le dije: Tú estarás por mía muchos días; no fornicarás, ni tomarás otro varón; lo mismo haré yo por ti.