El echar suertes pone fin a los litigios y decide entre las partes en pugna.
Los pleitos más difíciles hay que ponerlos en manos de Dios.
Las suertes ponen fin a los litigios y deciden entre los poderosos.
/nLa suerte pone fin a los pleitos, /nY decide entre los poderosos.
La suerte pone fin a los pleitos, y separa los poderosos.