basada en la esperanza de la vida eterna, que el Dios que no miente prometió desde antes del comienzo del tiempo,
Nuestra esperanza es la vida eterna, la cual Dios, que no miente, ya había prometido antes de la creación.
con la esperanza de vida eterna, prometida desde toda la eternidad por Dios que no miente,
en la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no miente, prometió desde antes del principio de los siglos,
en la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no puede mentir, prometió desde antes del principio de los siglos,