Hechos 5:28

diciendo: —¿No os mandamos estrictamente que no enseñaseis en este nombre? ¡Y he aquí habéis llenado a Jerusalén con vuestra doctrina y queréis echar sobre nosotros la sangre de este hombre!

Otras versiones de la Biblia

--Les hemos prohibido terminantemente enseñar en ese nombre. Sin embargo, ustedes han llenado a Jerusalén con sus enseñanzas, y se han propuesto echarnos la culpa a nosotros de la muerte* de ese hombre.

- Versão NVI-ES (Nueva Version Internacional)

—Ya les habíamos advertido que no enseñaran más acerca de ese hombre Jesús, pero no nos obedecieron. A todos en Jerusalén les han hablado de Jesús, y hasta nos acusan a nosotros de haberlo matado.

- Versão TLA (Traducción en Lenguaje Actual)

y les dijo: «Os prohibimos severamente enseñar en ese nombre, y sin embargo vosotros habéis llenado Jerusalén con vuestra doctrina y queréis hacer recaer sobre nosotros la sangre de ese hombre.»

- Versão BJ-ES (Biblia de Jerusalen)

diciendo: ¿No os mandamos estrictamente que no enseñaseis en ese nombre? Y ahora habéis llenado a Jerusalén de vuestra doctrina, y queréis echar sobre nosotros la sangre de ese hombre.

- Versão RVR60 (Reina Valera 1960)

diciendo: ¿No os ordenamos rigurosamente, que no enseñaseis en este nombre? Y he aquí, habéis llenado a Jerusalem de vuestra doctrina, y queréis echar sobre nosotros la sangre de este hombre.

- Versão RVR04 (Reina Valera 2004)

Contexto del verso

  • 27
    Cuando los trajeron, los presentaron al Sanedrín, y el sumo sacerdote les preguntó
  • 28
    diciendo: —¿No os mandamos estrictamente que no enseñaseis en este nombre? ¡Y he aquí habéis llenado a Jerusalén con vuestra doctrina y queréis echar sobre nosotros la sangre de este hombre!
  • 29
    Pero respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: —Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.

Imagen del verso

diciendo: —¿No os mandamos estrictamente que no enseñaseis en este nombre? ¡Y he aquí habéis llenado a Jerusalén con vuestra doctrina y queréis echar sobre nosotros la sangre de este hombre! - Hechos 5:28