Jeremías 30:14

Todos tus amantes se han olvidado de ti; ya no te buscan. Porque te he herido como a enemigo con castigo de hombre cruel, a causa del gran número de tus maldades y de la multitud de tus pecados.

Otras versiones de la Biblia

Todos tus amantes te han olvidado; ya no se ocupan de ti. Por causa de tu enorme iniquidad, y por tus muchos pecados, te he golpeado, te he corregido, como lo haría un adversario cruel.

- Versão NVI-ES (Nueva Version Internacional)

Los países en que confiabas te han olvidado; ¡ya no les importas! Yo te he causado dolor, como si fuera tu enemigo. Pero no tiene caso que te quejes; ¡para tu dolor ya no hay remedio! Te he castigado y corregido, porque has cometido muchos pecados.

- Versão TLA (Traducción en Lenguaje Actual)

Todos tus amantes te olvidaron, por tu salud no preguntaron. Porque con herida de enemigo te herí, castigo de hombre cruel, (por tu gran culpa, porque son enormes tus pecados).

- Versão BJ-ES (Biblia de Jerusalen)

Todos tus enamorados te olvidaron; no te buscan; porque como hiere un enemigo te herí, con azote de adversario cruel, a causa de la magnitud de tu maldad y de la multitud de tus pecados.

- Versão RVR60 (Reina Valera 1960)

Todos tus amantes te olvidaron; no te buscan; porque de herida de enemigo te herí, con azote de cruel, a causa de la muchedumbre de tu maldad, y de la multitud de tus pecados.

- Versão RVR04 (Reina Valera 2004)

Contexto del verso

  • 13
    No hay quien juzgue tu causa; no tienes remedio eficaz para tu úlcera.
  • 14
    Todos tus amantes se han olvidado de ti; ya no te buscan. Porque te he herido como a enemigo con castigo de hombre cruel, a causa del gran número de tus maldades y de la multitud de tus pecados.
  • 15
    ¿Por qué gritas por tu quebranto? Tu dolor es incurable, porque por la grandeza de tu iniquidad y por tus muchos pecados te he hecho esto.

Imagen del verso

Todos tus amantes se han olvidado de ti; ya no te buscan. Porque te he herido como a enemigo con castigo de hombre cruel, a causa del gran número de tus maldades y de la multitud de tus pecados. - Jeremías 30:14